Y es que amigos, así es como lo podrían llamar este año.
No puede ser una casualidad que el año en el que Carlos Sainz va a estrenarse en el famoso rally todos los madrileños hayamos estado entrenándonos durante tantos meses.
Un circuíto de fórmula uno se mantiene constante a lo largo de todos los años, los pilotos lo pueden memorizar, y saber dónde están las curvas, dónde se puede acelerar y dónde deben frenar. Pero al igual que en el rally del desierto, los conductores de la M-30 pasan cada día por un trazado nuevo, arriesgado, sin arcenes, con carriles tan estrechos que no cabrían dos autobuses y un coche, incluso dudo que quepan tres coches en paralelo en ciertos puntos como por debajo del puente de Toledo. Tan famoso por el dicho "Mucho puente para tan poco río", ahora podríamos decir, "muchos carriles para tan poco puente".
Pero tengo que reconocer una cosa. Gracias a las obras los madrileños por fin tienen miedo a la carretera, y tanto se nota esto que la velocidad media no supera los 50 km/hora, y el volumen de coches es considerablemente menor (al menos por la M-30), ya que yo puedo llegar al trabajo en 35 minutos, en lugar de los 60 que solía tardar antiguamente.
Bueno amigos, he de dejaros, me pongo el casco y los cinturones de seguridad cruzados. Voy a mi vehículo todo terreno para enfrentarme a la odisea diaria de la M-30. Espero no caer en alguno de los socavones que se abren a nuestros pies...
29 de diciembre de 2005
21 de diciembre de 2005
La Ilusión nunca se pierde
Mañana es día 22 de Diciembre. Uno de los días más esperados del año, más incluso que el de Navidad o el del propio cumpleaños de una persona. ¿Y esto por qué? ¡¡Porque llega el Gordo de Navidad!!
No deja de ser curioso que prefiramos oír la voz de los niños de San Idelfonso cantar una serie de números que no se parecen en nada al nuestro (por muchos que digan) antes que esperar el día de Navidad en el que por muy mal que vayan las cosas siempre cae algún regalo.
Y es que desde pequeño me enseñaron que jugar con dinero es muy peligroso. Y que en los juegos de Azar la banca siempre gana. ¿Qué es la lotería sino una repartición de bienes en el que quien lo organiza se lleva una parte?
No nos engañemos, la lotería es una de las mayores injusticias de la vida. Todo el mundo paga un poquito para que muy pocos no tengan que hacer nada más el resto de sus vidas. ¿No está esta teoría en contra de la igualdad en el mundo?
¿Pero qué le vamos a hacer? Si la frase más repetida es "Me va a tocar a mi" o "la ilusión nunca se pierde". No, la ilusión no se pierde mientras pagues 20€ por ella. Tú eliges.
No deja de ser curioso que prefiramos oír la voz de los niños de San Idelfonso cantar una serie de números que no se parecen en nada al nuestro (por muchos que digan) antes que esperar el día de Navidad en el que por muy mal que vayan las cosas siempre cae algún regalo.
Y es que desde pequeño me enseñaron que jugar con dinero es muy peligroso. Y que en los juegos de Azar la banca siempre gana. ¿Qué es la lotería sino una repartición de bienes en el que quien lo organiza se lleva una parte?
No nos engañemos, la lotería es una de las mayores injusticias de la vida. Todo el mundo paga un poquito para que muy pocos no tengan que hacer nada más el resto de sus vidas. ¿No está esta teoría en contra de la igualdad en el mundo?
¿Pero qué le vamos a hacer? Si la frase más repetida es "Me va a tocar a mi" o "la ilusión nunca se pierde". No, la ilusión no se pierde mientras pagues 20€ por ella. Tú eliges.
13 de diciembre de 2005
Un ser Gafe
Tengo que reconocerlo, soy un gafe. Y si alguien le encuentra una sola ventaja a ser gafe que me lo haga saber, por favor.
El problema mismo de ser un gafe es que cualquier cosa que se planee, sale mal por definición. Por ello cualquier ventaja que puedas encontrar a ser gafe se convierte automáticamente en un inconveniente.
Mis amigos me conocían como "el chico de los unos", y no por mis bajas notas precisamente. Juegos de rol, juegos de mesa, incluso en el parchís. Preferían tener dos fichas a tiro de '4' y '5', que una sola a tiro de '1'. ¡Qué dificil es ganar así!. Pero el mayor problema es que cuando necesitaba sacar un uno, nunca salía...
Y no es una cuestión de creencias. Supera incluso alguna ley de Murphy.
Debo patentar el 'teorema de Bernhelm': Cuando una persona es gafe, aquellas personas que le rodean se ven afectadas por un aura de mala suerte.
Supongamos que una persona tira una moneda al aire...¿cara o cruz?. Yo que soy gafe, te digo que va a salir cara. Tú que sabes que soy gafe, eliges cruz. Resultado: ¡Cara!, tú pierdes, y yo que no he apostado tampoco gano... ¡¿¡pero quien hubiera dicho cara sabiendo que yo soy gafe!?!
Después de tantos años conviviendo con este conocimiento he aprendido una cosa. Cada vez que no juego a la lotería, cada vez que no hago una apuesta, estoy no perdiendo dinero, que a los ojos de un gafe es casi como ganarlo. Pues bien, os hago una apuesta. ¿Qué apostais a que en este sorteo de navidad yo pierdo 20€ menos que vosotros? De todas formas, si apostáis tenéis todas las de perder, y si os toca el gordo ¡¡¡ENHORABUENA!!!
El problema mismo de ser un gafe es que cualquier cosa que se planee, sale mal por definición. Por ello cualquier ventaja que puedas encontrar a ser gafe se convierte automáticamente en un inconveniente.
Mis amigos me conocían como "el chico de los unos", y no por mis bajas notas precisamente. Juegos de rol, juegos de mesa, incluso en el parchís. Preferían tener dos fichas a tiro de '4' y '5', que una sola a tiro de '1'. ¡Qué dificil es ganar así!. Pero el mayor problema es que cuando necesitaba sacar un uno, nunca salía...
Y no es una cuestión de creencias. Supera incluso alguna ley de Murphy.
Debo patentar el 'teorema de Bernhelm': Cuando una persona es gafe, aquellas personas que le rodean se ven afectadas por un aura de mala suerte.
Supongamos que una persona tira una moneda al aire...¿cara o cruz?. Yo que soy gafe, te digo que va a salir cara. Tú que sabes que soy gafe, eliges cruz. Resultado: ¡Cara!, tú pierdes, y yo que no he apostado tampoco gano... ¡¿¡pero quien hubiera dicho cara sabiendo que yo soy gafe!?!
Después de tantos años conviviendo con este conocimiento he aprendido una cosa. Cada vez que no juego a la lotería, cada vez que no hago una apuesta, estoy no perdiendo dinero, que a los ojos de un gafe es casi como ganarlo. Pues bien, os hago una apuesta. ¿Qué apostais a que en este sorteo de navidad yo pierdo 20€ menos que vosotros? De todas formas, si apostáis tenéis todas las de perder, y si os toca el gordo ¡¡¡ENHORABUENA!!!
4 de diciembre de 2005
Mi querido Anisakis
Te dedico a ti, compañero de fatigas, estas tiernas letras para expresar todo lo que por ti padezco.
No es por el mero hecho de ser una burla, ni motivo de risas fáciles el promulgar a los cuatro vientos una alergia a algo que no sabía ni que existía. Es el recochineo de los camareros que cuando les dices que eres alérgico al pescado y por tanto no puedes comerte ese salmón ahumado que te han servido, te ofrecen una ensalada mixta y te la sirven... ¡¡¡con atún!!!
Quisiera por otra parte recordar estas fiestas, con canapés rondando alrededor de los comensales. Todos aquellos pequeños bocaditos deliciosos que tan lejanos quedan ahora de mi estómago, y sin embargo tan cerca están de mis deseos.
¿Qué voy a hacer si una alergia puede dar más tema de conversación que los cinco últimos partidos del Real Madrid? No voy a culpar al fútbol, los pobres cobran demasiado como para que nos metamos con ellos. Pero soy tan simple como mi querido anisakis. Persona a la que no se lo he contado, persona a la que se lo cuento. Así que pequeño gusanito, me debes una, pues te estoy haciendo un poco más famoso.
Sinceramente Bernhelm.
PD: Espero que en el futuro nos llevemos un poco mejor.
No es por el mero hecho de ser una burla, ni motivo de risas fáciles el promulgar a los cuatro vientos una alergia a algo que no sabía ni que existía. Es el recochineo de los camareros que cuando les dices que eres alérgico al pescado y por tanto no puedes comerte ese salmón ahumado que te han servido, te ofrecen una ensalada mixta y te la sirven... ¡¡¡con atún!!!
Quisiera por otra parte recordar estas fiestas, con canapés rondando alrededor de los comensales. Todos aquellos pequeños bocaditos deliciosos que tan lejanos quedan ahora de mi estómago, y sin embargo tan cerca están de mis deseos.
¿Qué voy a hacer si una alergia puede dar más tema de conversación que los cinco últimos partidos del Real Madrid? No voy a culpar al fútbol, los pobres cobran demasiado como para que nos metamos con ellos. Pero soy tan simple como mi querido anisakis. Persona a la que no se lo he contado, persona a la que se lo cuento. Así que pequeño gusanito, me debes una, pues te estoy haciendo un poco más famoso.
Sinceramente Bernhelm.
PD: Espero que en el futuro nos llevemos un poco mejor.
30 de noviembre de 2005
De como somos
Todos, o supongo que la mayoría solemos mirarnos cada mañana en el espejo y preguntarnos, ¿Qué pensarán de nosotros los demás cuando nos vean?. Es una pregunta pasajera, que se nos olvida según dejamos de mirarnos, como si de repente, al no vernos, desaparecieramos, y bueno, ya no se fijarán en mis zapatos, o en que la camisa no va a juego con la corbata.
No hacemos más que engañarnos a nosotros mismos, puesto que desde el momento en el que salimos a la calle juzgamos a todos los que vemos, y nos preguntamos de todos ellos, ¿pero se habrá mirado al espejo antes de salir? ¿Cómo podemos ser tan críticos con los demás y tan permisivos con nosotros mismos?
Caminamos serios, con paso firme, y pensando en nuestras cosas. Observamos lo que nos rodea, y siempre hay algo que nos llama la atención. Me hace gracia las cosas que más nos distraen mientras vamos por la calle. Miramos a la gente que ríe, como si estuvieran locos. A los que cantan, pensando en lo mal que lo hacen. A los que van corriendo, como si fuera un pecado. A los coches que pitan, por molestos. A los niños jugando con una pelota, por miedo a que se vayan a la carretera. Y últimamente a los conductores que hablan por móvil, para apartarnos de ellos.
Nos entretiene llegar a casa, encender la tele, y ver como dos personas desconocidas hablan de su vida, como si realmente fuese interesante. Pero nos parece inconcebible parar a alguien por la calle, saludarle, y contarnos nuestras vidas, pensando que es ilógico, o menos entretenido.
Nos gusta criticar, pero no que nos critiquen. Nos gusta mirar, pero no que nos miren.
Por qué no pensamos que nos gusta saludar, y que nos saluden, nos gusta sonreír, y que nos sonrían, nos gusta hablar, y que nos cuenten cosas. Entonces, ¿por qué no saludamos por la calle? Y no me refiero a los que te encuentras en el ascensor, les dices hola, y comentas con ellos el tiempo. Esto me recuerda a otro tema del que hablaré otro día. ¿Por qué saludamos a los vecinos que nos encontramos dentro del portal, pero si nos los encontramos fuera nos hacemos los suecos? ¿No os ha pasado nunca? Una vez cruzamos ese límite imaginario del portal, dejan de ser vecinos, para ser un desconocido más.
No hacemos más que engañarnos a nosotros mismos, puesto que desde el momento en el que salimos a la calle juzgamos a todos los que vemos, y nos preguntamos de todos ellos, ¿pero se habrá mirado al espejo antes de salir? ¿Cómo podemos ser tan críticos con los demás y tan permisivos con nosotros mismos?
Caminamos serios, con paso firme, y pensando en nuestras cosas. Observamos lo que nos rodea, y siempre hay algo que nos llama la atención. Me hace gracia las cosas que más nos distraen mientras vamos por la calle. Miramos a la gente que ríe, como si estuvieran locos. A los que cantan, pensando en lo mal que lo hacen. A los que van corriendo, como si fuera un pecado. A los coches que pitan, por molestos. A los niños jugando con una pelota, por miedo a que se vayan a la carretera. Y últimamente a los conductores que hablan por móvil, para apartarnos de ellos.
Nos entretiene llegar a casa, encender la tele, y ver como dos personas desconocidas hablan de su vida, como si realmente fuese interesante. Pero nos parece inconcebible parar a alguien por la calle, saludarle, y contarnos nuestras vidas, pensando que es ilógico, o menos entretenido.
Nos gusta criticar, pero no que nos critiquen. Nos gusta mirar, pero no que nos miren.
Por qué no pensamos que nos gusta saludar, y que nos saluden, nos gusta sonreír, y que nos sonrían, nos gusta hablar, y que nos cuenten cosas. Entonces, ¿por qué no saludamos por la calle? Y no me refiero a los que te encuentras en el ascensor, les dices hola, y comentas con ellos el tiempo. Esto me recuerda a otro tema del que hablaré otro día. ¿Por qué saludamos a los vecinos que nos encontramos dentro del portal, pero si nos los encontramos fuera nos hacemos los suecos? ¿No os ha pasado nunca? Una vez cruzamos ese límite imaginario del portal, dejan de ser vecinos, para ser un desconocido más.
22 de noviembre de 2005
Tiempo al tiempo
¿Qué es el tiempo y por qué nos amarga tanto?
Tiempo, esa cuarta dimensión que no se ve y depende de tantas cosas... de nuestro estado de ánimo, de la compañía, del meridiano en el que nos encontramos, la precisión de nuestro reloj, de si llegamos tarde, o por lo contrario esperamos algo... Depende hasta de nuestra edad, pues cuanto mayores somos, más rápido se nos pasa. Es decir, ¡el tiempo depende de si mismo! De ahí ese refrán de tiempo al tiempo...
Un vaso medio lleno o medio vacío al fin y al cabo tiene una cantidad medible de líquido. ¿Pero cómo se mide una franja de tiempo? ¿Con un reloj? Fundamentado en las oscilaciones de un cristal de cuarzo, el cual puede ser más grande o más pequeño, se supone que oscila una vez al segundo. Pero aún con esto imaginemos que nuestro reloj es el más preciso del mundo. Decidimos medir una franja de tiempo desde ya hasta ya. ¿Cómo hemos sido de precisos? ¿Cuánto hemos tardado en apretar el botón? ¿Hemos tardado lo mismo en ponerlo en marcha que en pararlo?
Científicamente,"El segundo (s) es la duración de 9 192 631 770 periodos de la radiación correspondiente a la transición entre los dos niveles hiperfinos del estado fundamental del átomo de cesio 133."
No sólo es difícil entender esta explicación, sino que yo no creo que ningún reloj tenga átomos de cesio en constante transición entre dos niveles hiperfinos de su estado fundamental, y menos que una persona lo lleve radiando por la calle. Bastante tenemos ya con la radiación de los móviles y las antenas.
Entonces, si no sabemos qué es el tiempo, obviando las miles de conversaciones diarias sobre el tiempo que hace y que todo el mundo ve, entonces, ¿Por qué nos amarga? ¿Por qué es tan importante ser puntual, y tan grave retrasarse? ¿Por qué nos ceñimos a un horario estricto diariamente? Tenemos un despertador para levantarnos, una hora de entrada al trabajo, horas para los descansos, para comer, y de salida. Hora para las series de la tele, y una puntualidad absoluta para atragantarnos con las uvas cada año. Y todo esto para que debido a nuestras imprecisiones con el tiempo los astrónomos decidan añadir años bisiestos a su antojo, que si uno cada cuatro años, que si cada cien años no, que si cada cuatrocientos si... Menudo mareo, y total, esto sólo le importa a los fabricantes de calendarios, ¿a quien más?.
Entonces ¿por qué agobiarse?. Dejemos todos el reloj en casa y vivamos un día sin preocuparnos por el tiempo. Eso sí, todos pondremos el despertador al día siguiente para evitar que nos echen del trabajo.
Tiempo, esa cuarta dimensión que no se ve y depende de tantas cosas... de nuestro estado de ánimo, de la compañía, del meridiano en el que nos encontramos, la precisión de nuestro reloj, de si llegamos tarde, o por lo contrario esperamos algo... Depende hasta de nuestra edad, pues cuanto mayores somos, más rápido se nos pasa. Es decir, ¡el tiempo depende de si mismo! De ahí ese refrán de tiempo al tiempo...
Un vaso medio lleno o medio vacío al fin y al cabo tiene una cantidad medible de líquido. ¿Pero cómo se mide una franja de tiempo? ¿Con un reloj? Fundamentado en las oscilaciones de un cristal de cuarzo, el cual puede ser más grande o más pequeño, se supone que oscila una vez al segundo. Pero aún con esto imaginemos que nuestro reloj es el más preciso del mundo. Decidimos medir una franja de tiempo desde ya hasta ya. ¿Cómo hemos sido de precisos? ¿Cuánto hemos tardado en apretar el botón? ¿Hemos tardado lo mismo en ponerlo en marcha que en pararlo?
Científicamente,"El segundo (s) es la duración de 9 192 631 770 periodos de la radiación correspondiente a la transición entre los dos niveles hiperfinos del estado fundamental del átomo de cesio 133."
No sólo es difícil entender esta explicación, sino que yo no creo que ningún reloj tenga átomos de cesio en constante transición entre dos niveles hiperfinos de su estado fundamental, y menos que una persona lo lleve radiando por la calle. Bastante tenemos ya con la radiación de los móviles y las antenas.
Entonces, si no sabemos qué es el tiempo, obviando las miles de conversaciones diarias sobre el tiempo que hace y que todo el mundo ve, entonces, ¿Por qué nos amarga? ¿Por qué es tan importante ser puntual, y tan grave retrasarse? ¿Por qué nos ceñimos a un horario estricto diariamente? Tenemos un despertador para levantarnos, una hora de entrada al trabajo, horas para los descansos, para comer, y de salida. Hora para las series de la tele, y una puntualidad absoluta para atragantarnos con las uvas cada año. Y todo esto para que debido a nuestras imprecisiones con el tiempo los astrónomos decidan añadir años bisiestos a su antojo, que si uno cada cuatro años, que si cada cien años no, que si cada cuatrocientos si... Menudo mareo, y total, esto sólo le importa a los fabricantes de calendarios, ¿a quien más?.
Entonces ¿por qué agobiarse?. Dejemos todos el reloj en casa y vivamos un día sin preocuparnos por el tiempo. Eso sí, todos pondremos el despertador al día siguiente para evitar que nos echen del trabajo.
19 de noviembre de 2005
La nueva Democracia
¿Qué es la democracia?
La palabra 'democracia' se compone del prefijo 'demo-' que significa población o pueblo y del sufijo '-cracia' que significa... bueno, todos sabemos qué significa 'democracia'
El poder de la democracia se ha basado siempre en la lógica de sus leyes. "Se hará lo que dicte la mayoría", si la mayoría se equivoca, todos sufrirán las consecuencias. Esto es de lo que se jactaba el partico nacional-socialista de Alemania en los años 40. El pueblo nos eligió, que asuma ahora su responsabilidad.
En la democracia nunca se ha hecho caso de las minorías, por no tener el poder suficiente para cambiar las leyes.
La tecnología actual permite ir más allá, llegar a personalizarlo todo. Hemos visto el poder de "rss" en internet, analizemos su potencial.
Con los "rss's" vamos a personalizar nuestras páginas web, nuestros portales y buscadores, obtendremos sólo las noticias que nos interesen, estaremos informados permanentemente de aquello que nos importe, sin tener que estar navegando por todos nuestros enlaces favoritos.
Tú sabes lo que te gusta, y personalizas tu página a tu gusto. Dentro de poco la publicidad sabrá lo que te gusta, y por lo que estás dispuesto a pagar, y te perseguirá allá donde estés. Se acabó una economía de escala de fabricamos este producto porque es así como le gusta a la mayoría de la gente. La personalización pronto estará al alcance del mercado. Mejores estudios de mercado, más relaciones en las inmensas bases de datos que manejan las grandes empresas. Y por supuesto más beneficios. La nueva democracia se acerca, todo navegante es un cliente potencial, no importa la mayoría, todos somos importantes, y a la vez tan poca cosa...
La palabra 'democracia' se compone del prefijo 'demo-' que significa población o pueblo y del sufijo '-cracia' que significa... bueno, todos sabemos qué significa 'democracia'
El poder de la democracia se ha basado siempre en la lógica de sus leyes. "Se hará lo que dicte la mayoría", si la mayoría se equivoca, todos sufrirán las consecuencias. Esto es de lo que se jactaba el partico nacional-socialista de Alemania en los años 40. El pueblo nos eligió, que asuma ahora su responsabilidad.
En la democracia nunca se ha hecho caso de las minorías, por no tener el poder suficiente para cambiar las leyes.
La tecnología actual permite ir más allá, llegar a personalizarlo todo. Hemos visto el poder de "rss" en internet, analizemos su potencial.
Con los "rss's" vamos a personalizar nuestras páginas web, nuestros portales y buscadores, obtendremos sólo las noticias que nos interesen, estaremos informados permanentemente de aquello que nos importe, sin tener que estar navegando por todos nuestros enlaces favoritos.
Tú sabes lo que te gusta, y personalizas tu página a tu gusto. Dentro de poco la publicidad sabrá lo que te gusta, y por lo que estás dispuesto a pagar, y te perseguirá allá donde estés. Se acabó una economía de escala de fabricamos este producto porque es así como le gusta a la mayoría de la gente. La personalización pronto estará al alcance del mercado. Mejores estudios de mercado, más relaciones en las inmensas bases de datos que manejan las grandes empresas. Y por supuesto más beneficios. La nueva democracia se acerca, todo navegante es un cliente potencial, no importa la mayoría, todos somos importantes, y a la vez tan poca cosa...
14 de noviembre de 2005
Somos Ganado
Desde pequeño siempre me he sorprendido por la capacidad humana de evolucionar.
Estamos en una era de explosión tecnológica. Aún no sabíamos decidirnos entre un video Beta o VHS cuando los DVD nos llegaron encima (sin contar los laser Discs extintos), y estos tienen las horas contadas, pues nos parece poco almacenaje el que cabe en ellos.
Pero qué puedo decir cuando me encuentro en una noticia: "las personas que acudieron a una manifestación oscilan entre 400.000 y 2 millones, dependiendo de la fuente". Cuando teníamos 2 años y contábamos, uno, dos, más de dos... éramos más precisos.
Según los últimos estudios la población de nuestro planeta ronda cerca de los 6.000 millones de personas. Tanto hemos evolucionado y aún no sabemos contar. ¿Qué ocurriría si contáramos a estas personas? ¿Hay dos mil millones de seres humanos? ¿O somos 25.000?
Nos enseñan a ser minuciosos en nuestro trabajo. Un error puede ser fatal, un margen de error del 1% puede acabar con un proyecto. Ni si quiera evitando todos los errores se pueden evitar catástrofes como la del Columbia. Existen medios técnicos, informáticos, e incluso el contar a dedo sería más preciso que las estimaciones realizadas.
Estamos en una era de explosión tecnológica. Aún no sabíamos decidirnos entre un video Beta o VHS cuando los DVD nos llegaron encima (sin contar los laser Discs extintos), y estos tienen las horas contadas, pues nos parece poco almacenaje el que cabe en ellos.
Pero qué puedo decir cuando me encuentro en una noticia: "las personas que acudieron a una manifestación oscilan entre 400.000 y 2 millones, dependiendo de la fuente". Cuando teníamos 2 años y contábamos, uno, dos, más de dos... éramos más precisos.
Según los últimos estudios la población de nuestro planeta ronda cerca de los 6.000 millones de personas. Tanto hemos evolucionado y aún no sabemos contar. ¿Qué ocurriría si contáramos a estas personas? ¿Hay dos mil millones de seres humanos? ¿O somos 25.000?
Nos enseñan a ser minuciosos en nuestro trabajo. Un error puede ser fatal, un margen de error del 1% puede acabar con un proyecto. Ni si quiera evitando todos los errores se pueden evitar catástrofes como la del Columbia. Existen medios técnicos, informáticos, e incluso el contar a dedo sería más preciso que las estimaciones realizadas.
9 de noviembre de 2005
Subcontratas
¿Cuándo llegarán las subcontratas a internet?
Qué queréis que os diga, estoy muy disgustado. Pues he visto en la ‘tele’ como está en la actualidad el negocio del dinero en España. Veréis, siempre nos ha gustado la idea de cobrar por no hacer nada, parece el sueño de toda persona. Por desgracia hay demasiada gente que lo ha conseguido. ¿Cómo es posible?, muy fácil.
Un ejemplo sencillo, digamos un inversor desea un trabajo a cambio de 20€, y se los da a una empresa que se compromete a hacer ese trabajo. La empresa que es muy lista sabe que ese trabajo lo puede hacer otra empresa por 18€. Es decir, ha ganado 2€ por el mero hecho de ¡no hacer nada!.
Más me ha disgustado saber que para ganar dinero sin hacer nada sí hacen cosas: minimizar la seguridad y reducir la calidad de los materiales.
Nos encontramos ahora con la empresa que ha cobrado 18€. Ésta sabe que con 18€ lo podría hacer, con los mejores materiales del mercado, y todas las condiciones de seguridad. Pero otra empresa se ofrece a hacerlo por 15€. Parece lógico pensar que la empresa que cobrará 15€ tendrá menos seguridad y peores materiales, pero, y aquí está el problema, la empresa que ha cobrado 18€ contrata a la de 15€ y ganará 3€ ¡sin hacer nada!.
Podemos seguir así hasta reducir al mínimo la seguridad, y el sueldo de los empleados, explotarlos para que se cumplan los plazos, y ganar mucho dinero a costa de los demás y sin dar palo al agua. ¿No es para estar disgustado?.
Por desgracia estas ‘alimañas’ (pues no logro encontrarles otro nombre) ya circulan por la red.
Quieres contratar un dominio, y estás toda una tarde buscando el precio más económico, sin encontrar el verdadero proveedor de este servicio. ¿Y qué has encontrado?, una variedad enorme de precios y de ofertas, tan dispar que no sabes qué trampa ni cartón puede haber en ellas. Quizás el negocio de ganar dinero sin hacer nada ya está en la red, y estés pagando un dinero excesivo por un servicio que realmente no te están ofreciendo. ¿Cómo se podrá regular todo esto?.
Qué queréis que os diga, estoy muy disgustado. Pues he visto en la ‘tele’ como está en la actualidad el negocio del dinero en España. Veréis, siempre nos ha gustado la idea de cobrar por no hacer nada, parece el sueño de toda persona. Por desgracia hay demasiada gente que lo ha conseguido. ¿Cómo es posible?, muy fácil.
Un ejemplo sencillo, digamos un inversor desea un trabajo a cambio de 20€, y se los da a una empresa que se compromete a hacer ese trabajo. La empresa que es muy lista sabe que ese trabajo lo puede hacer otra empresa por 18€. Es decir, ha ganado 2€ por el mero hecho de ¡no hacer nada!.
Más me ha disgustado saber que para ganar dinero sin hacer nada sí hacen cosas: minimizar la seguridad y reducir la calidad de los materiales.
Nos encontramos ahora con la empresa que ha cobrado 18€. Ésta sabe que con 18€ lo podría hacer, con los mejores materiales del mercado, y todas las condiciones de seguridad. Pero otra empresa se ofrece a hacerlo por 15€. Parece lógico pensar que la empresa que cobrará 15€ tendrá menos seguridad y peores materiales, pero, y aquí está el problema, la empresa que ha cobrado 18€ contrata a la de 15€ y ganará 3€ ¡sin hacer nada!.
Podemos seguir así hasta reducir al mínimo la seguridad, y el sueldo de los empleados, explotarlos para que se cumplan los plazos, y ganar mucho dinero a costa de los demás y sin dar palo al agua. ¿No es para estar disgustado?.
Por desgracia estas ‘alimañas’ (pues no logro encontrarles otro nombre) ya circulan por la red.
Quieres contratar un dominio, y estás toda una tarde buscando el precio más económico, sin encontrar el verdadero proveedor de este servicio. ¿Y qué has encontrado?, una variedad enorme de precios y de ofertas, tan dispar que no sabes qué trampa ni cartón puede haber en ellas. Quizás el negocio de ganar dinero sin hacer nada ya está en la red, y estés pagando un dinero excesivo por un servicio que realmente no te están ofreciendo. ¿Cómo se podrá regular todo esto?.
8 de noviembre de 2005
Bienvenido Mister Bernhelm
Como no sabía que entrada darme he recurrido a una ironía para invitarme a mi mismo en esta explosión de literatura en internet.
Digo explosión de literatura porque no sé muy bien cómo calificar a los 'blogs'.
¿Son acaso información?¿Documentos científicos?¿Investigaciones?¿O son meras opiniones vertidas porque sus creadores creen que realmente importan a los demás?.
¿Acaso no soy yo un ingenuo más que piensa que mis aventuras y/o desdichas pueden interesar a alguien?¿Servirá todo esto para que en un futuro nos investiguen y puedan así saber como era nuestra sociedad con todos estos escritos?¿Habrá una sociedad futura?¿Y si es así, tendrá acceso a este montón de 'bits' almacenados en un único campus de 'google'?
Bueno, lo que es seguro es que este 'blog' sirve como 'brainstorm' al final de una jornada 'cansina' (como dicen en Extremadura) y va a ser muy útil para descargar la cabeza antes de acabar agotado y dormido. Y espero que sea en la cama y no encima del teclado, pues podría ser contraproducente.
Bienvenidos a mi 'blog' a todos vosotros, y a mi mismo el primero.
Digo explosión de literatura porque no sé muy bien cómo calificar a los 'blogs'.
¿Son acaso información?¿Documentos científicos?¿Investigaciones?¿O son meras opiniones vertidas porque sus creadores creen que realmente importan a los demás?.
¿Acaso no soy yo un ingenuo más que piensa que mis aventuras y/o desdichas pueden interesar a alguien?¿Servirá todo esto para que en un futuro nos investiguen y puedan así saber como era nuestra sociedad con todos estos escritos?¿Habrá una sociedad futura?¿Y si es así, tendrá acceso a este montón de 'bits' almacenados en un único campus de 'google'?
Bueno, lo que es seguro es que este 'blog' sirve como 'brainstorm' al final de una jornada 'cansina' (como dicen en Extremadura) y va a ser muy útil para descargar la cabeza antes de acabar agotado y dormido. Y espero que sea en la cama y no encima del teclado, pues podría ser contraproducente.
Bienvenidos a mi 'blog' a todos vosotros, y a mi mismo el primero.
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