24 de abril de 2007

Radios

No hay que ir muy lejos para darse cuenta de que algo ocurre en este País.

Es cierto que en función de la comunidad autónoma, la vida política que llega a nuestros oídos es muy distinta.

Cuando estás en Madrid los malos son los catalanes. Cuando estás en Cataluña, son los madrileños.

La cultura influye en nuestros pensamientos. En término medio, alguien nacido en el País Vasco tendrá un concepto distinto de España que alguien nacido en Andalucía. La familia también influye, al igual que los amigos. El ambiente en el que uno se mueve en general.

Pero sin duda, es la propaganda política que nos llega la que más nos condiciona.

Un día te levantas por la mañana, coges el coche, y pones la radio para enterarte de las noticias del día. Noticias, que en general, deberían estar exentas de politiqueo.

Pero es asombroso escuchar 20 minutos una emisora, y cambiar a otra de ideas políticas totalmente distintas. ¿Cómo puede haber conceptos del mismo país tan divergentes?. Si en una emisora va todo genial, y los que crean problemas son los de la oposición, en otra problema es el presidente del gobierno el que es un sinvergüenza, y que todo va fatal por él. ¿Toda esta historia para conseguir hinchas? ¿Eso es lo que somos?.

Aunque hubo una cosa que me hizo despertar. La emisora que estaba escuchando puso publicidad. Cambié de canal... y ¡qué casualidad! ¡La otra emisora estaba poniendo el mismo anuncio!

Con estos conceptos tan diferentes que nos venden del País donde vivimos... y todos nos quieren para lo mismo. ¡Viva el merchandaising!

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